San Luis Potosí, 13 de junio de 2025 – Un caso estremecedor de maltrato animal ha conmocionado a la capital potosina. En la colonia Valle de Jacarandas II, autoridades y activistas rescataron a 14 perros que vivían en condiciones deplorables, tras una denuncia ciudadana que alertó sobre olores fétidos y el sufrimiento de los animales. La responsable, identificada como Ana María “N”, de 53 años, fue vinculada a proceso por el delito de maltrato animal y permanece en prisión preventiva.

El pasado 7 de junio, elementos de la Guardia Civil Estatal ingresaron a un domicilio tras recibir reportes al 911. En el lugar encontraron una escena desgarradora: 14 perros vivos, demacrados y con heridas, rodeados de basura, excrementos y los restos óseos de al menos 30 canes, algunos quemados. Cuatro perros fueron hallados muertos en el sitio. La activista Fátima Ramírez Martínez, de la Fundación “Huellitas”, documentó las condiciones, compartiendo imágenes que se viralizaron en redes sociales, generando indignación en la comunidad.

“Es uno de los peores casos que hemos visto. Los perros estaban hambrientos, sin agua, en un entorno de muerte y abandono”, relató Ramírez. Los animales rescatados fueron trasladados a clínicas veterinarias, pero su estado crítico pone en riesgo la vida de varios. La Fiscalía General del Estado, a través de su Unidad Especializada en Maltrato Animal, continúa investigando posibles conexiones con otros casos y evalúa el estado psicológico de la imputada, quien se hacía pasar por rescatista.

El caso ha desatado un debate sobre la necesidad de endurecer las leyes contra el maltrato animal. El diputado Luis Felipe Castro Barrón anunció reformas para aumentar las penas, mientras el arzobispo de San Luis Potosí condenó los hechos como una “crisis de valores”. La ciudadanía exige justicia y mayor protección para los animales.

Llamado a la Acción: Las autoridades piden denunciar cualquier caso de maltrato animal a la FGESLP, proporcionando pruebas como fotos o videos. La investigación sigue en curso, y se espera que el caso marque un precedente en la lucha contra la crueldad animal en San Luis Potosí.